viernes, 26 de abril de 2013

Admiración por Maria de Villota

Cuando iba corriendo por las calles de Madrid en la Medio Marathon del pasado 7 de abril, intentaba disfrutar de sus calles, de su gente, de los niños animando, de la gente mayor que, independientemente el tiempo que hagas, sientes que te admira por el solo hecho de participar; policías, bomberos que te aplauden y te dan aliento cuando, por momentos, la cabeza te dice lo cómodo que estarías viendo en lugar de corriendo. Es imposible devolverles el aplauso a todos ellos. Pero en Madrid sí me salió de manera automática aplaudir a una persona. No es fácil reconocer a la gente entre el público pero en un momento conseguí distinguir a María de Villota, piloto de coches, que en julio del año pasado sufrió un grave accidente en el que casi pierde la vida, y no me salió otra reacción que devolverle el aplauso. Le aplaudí por su lucha, por su fuerza, por su sonrisa, por ser un ejemplo.
Hoy he leído unas declaraciones suyas en "El Confidencial" que no han hecho más que reforzar la imagen que tenía sobre ella. El artículo señala que el optimismo, la fortaleza y el pensamiento positivo han sido siempre características de la personalidad de María y sobre lo que la piloto dice que el accidente no ha hecho más que reforzar esa forma de ser sin la que no hubiera podido salir adelante de ese "nuevo nacimiento". Habla de su accidente como una nueva oportunidad que le ha dado la vida tras el que ha cambiado su escala de valores, dándose cuenta que para ser feliz no necesita demasiado. Por último, haciendo un símil con su profesión de piloto, traslada que corremos mucho, no solo con los coches, también en la vida y así lo que ocurre es que nosotros no conducimos nuestra vida, la vida nos conduce a nosotros.
Muchas veces hemos comentado que parece que estamos esperando a que la vida nos de golpes drásticos para cambiar ¿a qué estamos esperando? ¿Cuántas historias como la de María tenemos que leer para darnos cuenta de lo mucho que debemos disfrutar de cada lo momento de la vida?
Gracias por el ejemplo y por las palabras María.

martes, 23 de abril de 2013

¿A qué te gustaría dedicarte si el dinero no fuese el objetivo?

Vi este video hace bastante tiempo pero hoy, mientras conducía, me ha venido a la cabeza sin ningún motivo, sin ninguna razón concreta. He comenzado a pensar en el mensaje que transmite, en las preguntas que va lanzando y he pensando en compartirlo con vosotros sin mis aportaciones ni comentarios para que cada uno reflexione a su manera, para que cada uno indague en su interior y pase un rato consigo mismo. Las imágenes están acompañadas de un discurso de Alan Watts.
Disfrutad de vuestra compañía. Ya me contareis. 


domingo, 21 de abril de 2013

El poder de la constancia contra la resignación.

Recientemente un jugador de fútbol me contaba que cuando a mitad de semana se veía fuera del equipo titular, prácticamente, se desactivaba y su intensidad bajaba sustancialmente. Entendía que por mucho que se esforzara en los entrenamientos que quedaban el resultado iba a ser el mismo: la suplencia. Para que pudiera ver el poder de la perseverancia contra la resignación, le puse como ejemplo la historia que Edurne Pasaban nos contó en la jornada "Equipos de Alto Rendimiento" celebrada en ADEGI el mes pasado. 
Como muchos recordareis, en el reto de Edurne por ser la primera mujer en ascender las 14 montañas de ocho mil metros, apareció la montañera coreana Oh Eun Sun con un gran equipo y con un país apoyándole para convertirse en la principal aspirante a conseguir el reto de Edurne. Así, cuando Edurne y su equipo estaban en el campo base del Shisha Pangma, les llegó la noticia de que la coreana ya había finalizado la ascensión se las 14 montañas y que le hacía la primera mujer en conseguirlo. Edurne en ningún momento ocultó que su reto era ser la primera mujer en conseguirlo pero también estaba el objetivo de culminar el reto de ascenderlas, a pesar de no ser la primera. Sin embargo la noticia que había llegado desde el Annapurna había dejado muy tocado a  todo el equipo, con, incluso, la duda de si merecía subir en ese momento el Shisha. Finalmente, ascendieron la última montaña, convirtiéndose Edurne, en ese momento, en la segunda mujer en coronar los 14 ocho miles. Edurne, a pesar de no ser la primer había conseguido un reto espectacular. Tiempo después, la federación coreana de montaña anunciaba que no daba por valida la ascensión de Oh al Kangchenjunga con lo que Edurne, desde ese momento, se convertía en la primera mujer en ascender los 14 ocho miles.
Si Edurne y su equipo, fruto de la resignación por no conseguir la meta de ser la primera mujer en subir los 14 ocho miles, hubieran decidido dejar para otro momento subir el Shisha, hubieran perdido la oportunidad de ser los primeros en hacerlo. Aquella perseverancia dio sus frutos. Lo mismo pasa con los futbolistas, si aunque crea que no va ser titular no sigue esforzándose y demostrando al entrenador que merece jugar más minutos, terminará por perder la oportunidad de conseguir su meta. ¡Qué ocurre si luego el entrenador cambia de opinión ¿o si el que iba a jugar se lesiona? La intensidad, la preparación para afrontar ese momento no sería la idónea y costaría mucho darle la vuelta. Y no solamente en el fútbol, si en el mundo empresarial, en nuestras empresas, no reconocen nuestro trabajo, no  nos ascienden o no nos suben el salario y nuestra reacción es desactivarnos, estaremos caminando en el sentido contrario al que deseamos. Muchas veces es difícil encontrar el sentido al esfuerzo, a la constancia, cuando no recibimos refuerzos positivos, cuando no vemos resultados a corto plazo pero ese esfuerzo, la tenacidad, seguro que, tarde o temprano, terminará recibiendo el premio. 
Aunque parezca algo obvio y sencillo, en la vida hay dos caminos, o sigues trabajando, intentándolo, siendo tenaz, perseverante, agrandando el círculo de influencia y luchas por tus metas o te resignas, protestas, echas la culpa a los demás, agrandas cada día tu círculos de preocupaciones y no te haces responsables de tu destino. ¿Tú cuál estás eligiendo?

lunes, 8 de abril de 2013

Meta conseguida: Finisher Media Maratón Madrid 2013

El ligero dolor en la planta del pie y la carga acumulada en las piernas todavía me hace revivir el momento en que cruzaba la meta de la Medio Maratón Villa de Madrid 2013 que corrí en el día ayer. Por mucho que lo trabajes, por mucho que lo creas tener claro, es espectacular la sensación que te produce el conseguir una meta que te has propuesto. 
A pesar del frío fue un día precioso para correr. Las dudas por la falta de algunos entrenamientos las intenté resolver por medio de una visualización positiva de la carrera y de ganar el juego interior que tantas veces no controlamos y nos hace desistir.  Pensamientos positivos, sensaciones buenas y a por el objetivo. El ánimo constante y los micro-retos que me fui marcando durante la carrera hicieron el resto. Es la segunda Media Maratón que termino y las dos con las mismas sensaciones de satisfacción. Por cierto, nada más llegar a casa me puse a mirar cuando podré participar en la siguiente ¡esto engancha!
Desde aquí, quiero dar las gracias a Josef Ajram y a su libro "No sé donde está el límite pero sí sé dónde no está" por lo que me ha ayudado a conseguir este nuevo reto. En diciembre escribí la entrada "Where is the limit? Josef Ajram" sobre el libro reseñando lo que significa esa frase "No sé dónde está el límite pero si sé dónde no está es la voluntad de superar una barrera que se convierte en un desafío personal, más allá de lo que hagan las mil personas que están corriendo a tu alrededor" Hace tiempo me ponía muchos condicionantes para no participar y, seguramente, al que más importancia le daba era al qué dirán. Gracias al trabajo constante, la fiebre por los comentarios del entorno hace mucho tiempo que se me pasó. Ahora mi rival soy yo. Mi objetivo es disfrutar y ser un finisher. ¿Qué podría hacer mejor tiempo si entrenará más? Desde luego y ese, probablemente, será mi próximo reto, pero también soy consciente que, además del deporte, está mi familia, mis amigos, el coaching y el trabajo y que hay que compaginar todo. Con esto quiero decir que todo aquel que se sienta con dudas, que se sienta presionado o piense que no puede hacerlo, tiene que dar el primer paso y ponerse en marcha. Como siempre hemos dicho la primera piedra en la base de un reto es querer actuar. ¿A qué estás esperando?  Where is your limit?